Briviesca es la capital de la Bureba, una de las comarcas más hermosas de la provincia de Burgos, a la que Azorín imprimió el nombre de "el corazón de Burgos". Por su trazado urbano también se la conoce como la bien trazada. El turista, en su recorrido, encontrará en cada plaza y rincón el sabor de una ciudad que se ha mantenido en el tiempo.

La villa de Briviesca, ubicada al nordeste de la provincia de Burgos, fue declarada Conjunto Histórico Artístico en el año 1983. No sólo su conglomerado artístico y su poso histórico pueden ofrecer un agradable recorrido a quien se acerque a la localidad. Los espacios naturales de la comarca de la Bureba, como el desfiladero de Pancorbo o los montes Obarenses, permiten la fusión de cultura y naturaleza en este espacio burgalés.

Para comenzar el recorrido por esta villa empezamos en la plaza Mayor desde donde, a simple vista, se puede observar el trazado urbano de la ciudad. Y es que la villa es todo orden. Sus calles se construyeron con la misma coherencia que sus casas señoriales, muchas de las cuales todavía portan escudos blasonados en sus fachadas.

En la iglesia del Convento de Santa Clara, destaca el retablo del s XVI, de estilo Manierista-Romanista, tallado en madera de nogal, mide 24 metros de altura, realizado en su mayoría por el escultor guipuzcoano Juan de Anchieta, uno de los principales escultores romanistas de España. El retablo de Santa Clara es único en su género y al conservarse sin policromía es posible observar el acabado intachable de su escultura. Es una verdadera joya del Renacimiento español.