El corral ha tenido una gran importancia en la economía familiar, gallinas ponedoras para proveerse de los imprescindibles huevos, pero sobre todo por la cría de pollos, gallos y más raramente patos y pavos alimentados con verduras y cereales que han dado lugar a muchas recetas, algunas de gran fama como el Gallo Turresilano, en Tordesillas (Valladolid), o la Gallina en Pepitoria.

El pavo, tanto de cría casera como asociado a la antigua figura del pavero itinerante, configuraba un plato tradicional de festividades y entre ellas la Navidad. Existe otro elemento vinculado a la provisión de aves a la dieta tradicional: los palomares, en directa relación con los campos de cereal, y así palomas y pichones estofados o escabechados forman parte del acerbo gastronómico de Castilla y León, especialmente vinculados con la comarca de Tierra de Campos.