El Carnaval de Podence, también conocido como Entrudo Chocalheiro, es una práctica social relacionada con el final del invierno y el comienzo de la primavera. Entre Domingo Gordo y Martes de Carnaval, en la pequeña aldea trasmontana de Podence, en el municipio de Macedo de Cavaleiros, salen por las calles, saltando y corriendo, los Caretos. Son personajes enmascarados con trajes llenos de flecos de lana de colores, máscaras de hojalata o cuero, y sonajeros en la cintura. El Careto de Podence es conocido por su singularidad artística, el "repicar del sonajero", del que las mujeres son el principal objetivo, un acto simbólico que remite a un origen remoto y una posible conexión con antiguos rituales agrarios y de fertilidad. Hoy, estos enmascarados que visitan las casas de vecinos y familiares, en un ritual de convivencia, son principalmente emigrantes. El Entrudo Chocalheiro constituye, así, un momento esencial en la vida de los descendientes de Podence, que regresan durante el Carnaval para dar continuidad a la práctica heredada de padres y abuelos. Como reflejo del contexto actual, es también común en nuestros días la participación de las jóvenes. La implicación se inicia en la infancia, cuando los niños comienzan a usar disfraces similares a los de los enmascarados y a imitar su comportamiento.

La Asociación Caretos de Podence ha desempeñado un importante papel para garantizar la viabilidad del Carnaval en las últimas cuatro décadas.