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La iglesia de San Miguel Arcángel fue reconstruida en el año 1516 sobre una iglesia anterior, posiblemente de estilo románico o mudéjar del s XII, con el fin de hacerla más espaciosa y englobar en ella las seis parroquias que ya existían en Grajal en el siglo XIII. Consta de tres naves separadas por grandes columnas toscanas, planta de salón, mezclando elementos del estilo gótico tardío y renacentista, con bóvedas barrocas.Se construye en diferentes etapas. Así, el abocinado de la portada es la parte más antigua de la iglesia, románico, pudiendo remontarse al s. XII. Y la torre, a los pies de la iglesia, es de tipo morisco, de ladrillo como toda la iglesia, y con 40 metros de altura. Tiene la particularidad de tener una esquina angulada. La capilla mayor es del s. XVI, estilo gótico tardío, muy influenciado por el sello renacentista. El crucero, la nave central y las laterales están compuestos por bóvedas barrocas con diferentes dibujos geométricos sobre yeso, siendo toda esta cubierta del siglo XVII.

Retablo Mayor de Roque Muñoz, del año 1600, de madera, predomina el color dorado. Compuesto por el banco, dos cuerpos y ático o coronamiento y a su vez dividido en tres calles verticales separadas por columnas estriadas con capiteles corintios. En el centro, la talla de San Miguel Arcángel, patrón de Grajal y quien da nombre a la iglesia, rodeado de un gran número de imágenes con un significado importante para la villa. Sin olvidar el resto de otros valiosos retablos, como el de San Sebastián y el Cristo de la Agonía.

La iglesia de Grajal tiene dos elementos peculiares que hacen que sea única y diferente a todas las demás:

-La ventana enrejada ubicada en un lateral de la capilla mayor: Corresponde al oratorio o tribuna señorial del palacio, desde donde los nobles oían la misa o veían los oficios litúrgicos sin mezclarse con el pueblo (palacio e iglesia están unidos).

-los dos armarios con rejas situados a ambos lados del presbiterio: aquí están guardadas las reliquias que fueron donadas por la familia de los Vega del palacio en el año 1546 y que serían expuestas en diferentes fechas litúrgicas y que actualmente solo pueden contemplarse el día 2 de febrero, día festivo de Las Candelas. Hay un documento en el archivo de la Casa Ducal de Alburquerque que habla de 180 reliquias. Hoy en día hay más. Es la segunda colección de reliquias más importante de la provincia tras las de San Isidoro en León.