El embalse, situado en el río Arlanzón, comenzó a explotarse en el año 1989 y tiene una altura sobre los cimientos de 65 metros y una capacidad de 75 millones de metros cúbicos. El nombre de la presa de Úzquiza le viene dado como recuerdo a uno de los tres pueblos que resultaron inundados durante la construcción del mismo.

En las aguas de este embalse se permite practicar casi todos los deportes náuticos, exceptuando la navegación a motor.